Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar,
y, otra vez, con el ala a sus cristales
jugando llamarán;
pero aquéllas que el vuelo refrenaban
tu hermosura y mi dicha al contemplar,
aquéllas que aprendieron nuestros nombres...
ésas ... ¡no volverán!
Volverán las tupidas madreselvas
de tu jardín las tapias a escalar,
y otra vez a la tarde, aún mas hermosas,
sus flores se abrirán;
pero aquéllas, cuajadas de rocío,
cuyas gotas mirábamos temblar
y caer, como lágrimas del día ...
ésas... ¡no vloverán!
Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar;
tu corazón, de su profundo sueño
tal vez despertará;
pero mudo y absorto de rodillas,
como de adora a Dios ante su altar,
como yo te he querido..., desengáñate:
¡así no te querrán!
Gustavo Adolfo Becquer
(1836-1870)
Gustavo Adolfo Becquer nació en Sevilla. Como estudiante de la pintura, comenzó una carrera pobre en Madrid, donde, después de un matrimonio infeliz, murió.
Sus obras revelan un escritor, que influyó en gran medida por Hoffman y Heine, poseía uno de los talentos más originales de la literatura española. A veces se le considera el fundador de la moderna escuela española de la poesía. Sus obras han pasado por muchas ediciones.